Federico A. comenta como la literatura ha trascendido en todos los aspectos de su vida.
“Mi padre es una figura central, importantísima para mí, lo he tomado siempre como un modelo, era un hombre inteligente, tocaba muy bien el piano, sabía mucho. Murió aquí de 85 años. No le encuentro ninguna mancha, ninguna falta siempre portaba centralmente…” Sostuvo en entrevista el Dr. Álvarez Arregui con una gran nostalgia al mostrar su admiración y afecto hacia su padre.
Por Adonai Jiménez Matías
Federico Álvarez Arregui nace en San Sebastián, España. Es uno de los pocos exiliados de la guerra civil en España. Es doctor e investigador en filosofía por la UNAM, ha colaborado como crítico literario en Excélsior, Novedades, Siempre y Revista de la Universidad de la UNAM, como director editorial de las revistas Literatura Mexicana y como colaborador de La Casa de las Américas. Trabajó en las editoriales Santillana, Altea y como director del Fondo de Cultura Económica en España.
En México también se ha dedicado a labores editoriales y periodísticas. En el año 2003 recibió el Premio Universidad Nacional, en 2004 el Consejo de Estado de la República de Cuba le impuso la "Medalla de la Amistad entre los Pueblos" y en el 2006 la distinción "Por la Cultura Nacional".
El pasado miércoles 30 de noviembre del año en curso tuve el honor de entrevistar al profesor Federico Álvarez Arregui que muy amablemente me recibió en su departamento. Era un espacio enorme, amplio, acogedor, lleno de libros y de un ambiente intelectual interesante. Algunos cuadros resaltaban en la entrada junto a un par de fotografías familiares. La sesión de preguntas fue muy extensa pero al final muy gratificante, ya que es una experiencia importante conocer un poco más de este personaje al que yo admiro demasiado. Al comenzar con las preguntas, Álvarez Arregui se mostró complaciente, amable, e interesado y me ofreció un lugar cómodo. Iniciamos platicando con unas preguntas personales off the record y después pasamos a las de la entrevista formal.
- ¿Qué significa la literatura para usted?
- La literatura es una de las manifestaciones de lo que llamamos las humanidades más altas del espíritu humano, a diferencia de la ciencia, la literatura es la forma mediante la cual nos reconocemos a nosotros mismos y descubrimos el nivel espiritual de nuestra propia conciencia.
- ¿Cuál es su género literario favorito?
- Pues no creo que tengo género literario favorito, pero el género literario al que más acudo últimamente es el ensayo
-¿Cuál ha sido el mejor ensayo que usted ha escrito?
- Nunca me han hecho esa pregunta, tengo uno en la computadora sobre la semiótica del arte que después de mi ensayo del Eclecticismo y el Marxismo creo que es el más importante.
- Se dice que usted es Marxista. ¿Esto es cierto? ¿Sí es cierto, por qué se identifica con esta corriente filosófica?
- Sí desde luego que sí, sigo esa corriente filosófica, ya que la he estudiado mucho con mi amigo Adolfo y me relaciono en gran manera con ella porque el Marxismo es la teoría y la práctica del pueblo, de la clase trabajadora en contra de la teoría y la práctica del capital. Estoy en contra de la burguesía financiera que es la que nos ha traído la situación catastrófica en la que estamos.
- ¿Qué es lo más significativo que puede rescatar de Adolfo Sánchez Vázquez?
- Bueno, Adolfo ha sido mi amigo desde el principio de mí llegada a México, tenía 10 años más que yo y generó conmigo una fraternidad estrecha. Los dos fuimos universitarios, el fue mi maestro y al final mi colega, nunca dejamos de vernos, ni de hablarnos. Los dos somos marxistas, los dos hemos convivido todos los problemas de la evolución del marxismo en los últimos años, participé de sus ideas de renovación del marxismo contra el dogmatismo, la ortodoxia, la estrechez y la mentira y bueno ha muerto pero me deja ese recuerdo de fidelidad y al mismo tiempo de innovación aunque ahora sea un tanto melancólico y pesimista.
- ¿Qué siente usted al ser uno de los pocos exiliados activos aquí en México?
- Tristeza porque acaba de morir Tomás Segovia que era la figura viva más importante de ese siglo. Del mundo intelectual quedamos Guiraud, tal vez el mayor, Arturo Souto, Santiago Genovés (antropólogo ilustre), Carlos Blanco y creo que yo soy el cuarto.
- ¿Qué me dice de su padre, ya que fue uno de los fundadores de la izquierda revolucionaria en España?
- Mi padre es una figura central importantísima para mí, lo he tomado siempre como un modelo, era un hombre inteligente, tocaba muy bien el piano, sabía mucho. Era valiente, un marido amantísimo de mi mamá y un padre fabuloso es decir, mi padre es la figura señera de mi vida. Murió aquí de 85 años, no le encuentro ninguna mancha, ninguna falta, siempre portaba centralmente.
- ¿Extraña su país natal?
- España tomada en grande no me interesa nada, ya que el pueblo español acaba de dar el triunfo a los franquistas, pero mi país natal sí. Yo nací en el país Vasco, en San Sebastián y el país Vasco como usted sabe, tiene de siempre una sensibilidad antiespañola, yo no soy independentista del país vasco, pero siento la inherencia que hay entre ser vasco y ser español.
- En su transición de España a Cuba y de Cuba a México, ¿Por qué prefirió residir en México y no en Cuba?
- Decidí volver a México porque era donde me ofrecían trabajo. El director de Bellas Artes, Barros Valero me ofreció la edición de la Revista de Bellas Artes, entonces me ilusionó mucho luego dirigí la Revista Ases de México. México fue en el comienzo de mi madurez mucho más consistente, de mi actividad política y sobre todo intelectual con la colaboración en los suplementos, revistas y boletines.
- A lo largo de su trayectoria laboral, ¿Cuál ha sido el puesto más importante que ha tenido?
- Bueno, el más importante fue dirigir el Fondo de Cultura Económica en Madrid durante siete años, pero uno de los trabajos de más honda satisfacción ha sido el ser editor en el Instituto de libros de La Habana. Hacer libros en Cuba durante la revolución era una fiesta cotidiana.
- ¿Por qué ha renunciado a su cargo en la revista de Literatura Mexicana?
- Porque he estado muy enfermo y porque ya está bien nueve años de ser director de una revista.
- ¿Cuál es la experiencia más grata que le dejó colaborar en esa revista?
- La relación con los colaboradores es tal vez, lo más grato. En una revista uno conoce a mucha gente y además la conoce intelectualmente, también la tarea de llevar la revista adelante es importante, ya que parece mentira pero, que una revista salga en su día es un pequeño triunfo.
- ¿Por qué siguió en la docencia?
- Porque era una especie de descubrimiento de mi verdadera función profesional. En la Universidad encontré la satisfacción de encontrar sentido a mi trabajo cotidiano.
- ¿En cuánto a su labor periodística qué nos puede decir?
- Mi labor periodística me llovió hace diez años en Excélsior donde me escogieron para sustituir en una columna a un gran amigo economista llamado Sergio de la Peña. Entonces empecé a escribir todos los martes durante 5 años, esa es la que considero mi labor periodística.
Finalmente terminamos la entrevista y platicamos un momento más, ya era un poco tarde y tuve que despedirme de él. Me abrazó y me dio las gracias, finalmente la agradecida era yo pero fue una experiencia que jamás olvidaré.
3 comentarios:
¡Qué buena entrevista en verdad! Me parece una muy buena idea que se vea reflejado el esfuerzo de los alumnos destacados, pues sirve como motivación y ayuda a los demás alumnos que cursan o cursarán respectivas materias. ¡Felicidades!
Atte: Siboney
Gracias es un esfuerzo para quienes sembramos en ellos el gusto por destacar y escribir!
Es un gran profesor, yo tuve la dicha de ser su alumna en la Facultad de Filosofía y Letras y es un hombre que sabe muchísimo y es grato escucharlo.
Publicar un comentario